Menú Cerrar

Los empresarios alertan de que la economía española «se asoma a una importante crisis»

Los responsables de la patronal CEOE han aprovechado la publicación de los datos de afiliación y paro registrado para emitir un duro comunicado en el que presentan una enmienda a la totalidad a la política económica del Gobierno. Lejos de compartir el diagnóstico positivo del Ejecutivo sobre la marcha del mercado de trabajo, los empresarios han asegurado que la pérdida de casi 190.000 cotizantes «confirma la tendencia a la desaceleración del mercado laboral» y auguran que España vislumbra a una importante crisis económica.

Sin embargo, el Gobierno insiste en destacar que es habitual la destrucción de empleo de agosto por la estacionalidad y que, aún así, el comportamiento del pasado mes fue mejor que el fin del verano de años anteriores a la pandemia.

Este argumento no convence ni un poco a los empresarios, muy al contrario, desde esta organización empresarial argumentan que llevan advirtiendo de la desaceleración de la ocupación desde que en abril se alcanzara el mayor ritmo de creación interanual de empleo (5,1%) para descender progresivamente mes a mes hasta el avance del 3,5% registrado en agosto pasado respecto al mismo mes del año anterior. Esta ralentización en el ritmo de avance de la afiliación «refleja el proceso de moderación de la actividad económica que inevitablemente afectará al empleo», vaticinan los empresarios.

De hecho, junto a esta advertencia, a los patronos les preocupa otro dato, el que muestra una fuerte destrucción de empleo a finales de agosto. El mes pasado terminó con 409.429 cotizantes menos que el último día hábil de julio, la cifra más alta en este periodo desde 1982. Esto supuso, además, doblar la destrucción media de empleo en ese periodo de los últimos quince años, han denunciado otras fuentes empresariales. En este punto, sin embargo, desde el Ejecutivo han asegurado hoy que se traba de cifras habituales y que, detrás de este fuerte recorte podría estar una «inmensa bolsa de contratos temporales» que las compañías han dejado agotar antes de hacer contrataciones con la nueva normativa.

Pero nada de esto tranquiliza a los empresarios que a la luz de todas estas cifras han alertado de que «como ya vaticinan algunos servicios de estudios, la economía española se asoma a una importante crisis, en la que la merma de la competitividad de las empresas y el estrechamiento de sus márgenes podrían desembocar en un deterioro aún mayor del empleo en el medio plazo».

Para evitar llegar a esta situación, la organización patronal reclama al Gobierno que actúe más decididamente sobre los factores que están ejerciendo la actual presión inflacionista y compensen su efecto entre los sectores que más están sufriendo, como el de la industria. Junto a ello, recuerdan que el fuerte encarecimiento de los precios hará que la recaudación tributaria termine «en máximos históricos» por lo que sugieren que estos ingresos públicos extra se destinen a «reducir la factura del IRPF en favor del bolsillo de los ciudadanos y de las empresas, como ya están explorando ostros países, entre ellos Alemania». Con este dinero también proponen compensaciones a las rentas más bajas y mayores impulsos a la formación de los trabajadores.

Los anuncios sobre el salario mínimo, una injerencia

En este comunicado, los empresarios también han contestado largo y tendido a las acusaciones vertidas en los últimos días por la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, acusando a la patronal de bloquear los convenios colectivos para no aplicar subidas salariales y de haber abandonado las negociaciones para un pacto salarial antes del verano.

«CEOE nunca se ha levantado de ninguna mesa. En todo caso, tras sucesivas propuestas empresariales para cerrar un acuerdo salarial antes del verano, no fue posible alcanzarlo por la exigencia de los sindicatos de introducir cláusulas para ligar los salarios al IPC, algo –añaden–que por responsabilidad no podíamos asumir», indica la nota de la gran patronal.

Así, rechazaron también las acusaciones de Díaz sobre que los empresarios están paralizando la negociación colectiva, asegurando que «en contra de lo que escuchamos en los últimos días, se desenvuelve en los parámetros habituales en épocas de dificultad». En este sentido, explicaron que si los contextos de crisis dificultan la negociación de los convenios, más aún la dificultan «los anuncios sobre subidas desmedidas del salario mínimo interprofesional». Según indican, estos anuncios son los que más bloquean los convenios «porque impactan en las tablas salariales, representando en la práctica una injerencia en la negociación colectiva», concluyen.

Fuente Original: Cinco Días

Contactar ahora