El mercado laboral no cambia lo suficiente: el cierre de verano apunta a una pérdida de 180.000 afiliados
El ministerio de la Seguridad Social publicará este martes a las 9 de la mañana los datos de afiliación correspondientes al mes de agosto. Junto a los datos de paro, que publica el ministerio de Trabajo y van de la mano, esta estadística ofrecerá una fotografía panorámica del mercado laboral en un verano muy esperado tras cosechar un récord de empleo. ¿Cómo cerrará agosto? Tradicionalmente, con una destrucción de los puestos más asociados a los servicios turísticos.
Reforma laboral mediante, los trabajos de verano siguen siendo en su mayoría temporales: echando mano a la serie diaria de afiliados, agosto cosechó en la primera quincena 21,2 millones de afiliaciones, 183.000 trabajadores menos que durante todo julio (21,38 millones). La destrucción de empleo al terminar verano se mantiene tras la pandemia, lo que reseña que el empleo que genera el verano sigue siendo estacional y que el modelo no ha cambiado lo suficiente. Contrasta con el máximo de afiliados diarios que registró al Seguridad Social en julio, con 21,42 millones de afiliaciones registradas el lunes y viernes de la tercera semana del séptimo mes del año.
¿Qué detalles encuentran los economistas? Javier Santacruz detalla que las vacaciones tradicionales, en los meses de julio y agosto, fijaban el grueso de las contrataciones en los meses estivales. Ahora, seguir la evolución del empleo es más difuso en términos de calendario porque el turismo también ‘estira’ los periodos de alta demanda y, como consecuencia, de contratación de personal. Los periodos vacacionales se reparten igual que el buen tiempo, desde mayo e incluso hasta octubre.
«Agosto y, probablemente, septiembre revelarán hasta donde se le ven las costuras a la creación de empleo en España porque no es sostenible un crecimiento basado en la firma en masa de contratos«, apunta Santacruz. El economista matiza que la «firma masiva de contratos» que deja la temporalidad y los contratos de corta duración puede derivar, a largo plazo, en una barrera para quienes quieren entrar al mercado laboral y desean hacerlo con una relación laboral estable. La previsión, según este experto, es tibia al borrar el efecto del empleo que creará el sector público.
«La firma masiva de contratos resulta interesante, porque significa que no ha cambiado el modelo de empleo en España tras la reforma laboral. Al menos, no lo suficiente», detalla a elEconomista.es Santacruz. La temporalidad, el pluriempleo y los trabajados estrechamente ligados a los servicios turísticos están la orden del día y protagonizarán la destrucción de empleo al cierre del verano.
Fuente Original: El Economista